De acuerdo con determinados estudios, España es uno de los países desarrollados con mayores niveles de robos en viviendas, con casi 1.190 casos por cada 100.000 habitantes. Por desgracia, pese a los datos, aún son muchos los españoles que no equipan sus hogares con alarmas y sistemas de seguridad suficientes o adaptados a las circunstancias de su vivienda.
En ciudades como Madrid, se producen de media cada día unos 40 robos con violencia en viviendas y pisos. Especialmente frágiles y expuestas son las viviendas unifamiliares situadas en urbanizaciones o alejadas de los núcleos urbanos. Los cuerpos de seguridad del Estado establecen que los “amigos de lo ajeno” no necesitan, de media, más de 120 minutos para conseguir estudiar, acceder y robar en una casa, especialmente en los momentos en los que los propietarios no se encuentran en casa.
Acciones en el suministro eléctrico
Uno de los factores que inciden en el número de robos tiene que ver con la presencia o no de alarmas de seguridad en el domicilio. Los intrusos suelen invertir la mayor parte del tiempo en estudiar los sistemas de detección con los que cuenta la casa, de cara a establecer la manera de neutralizarlos. Cortar el suministro eléctrico suele ser, de acuerdo con los estudios de las principales firmas de seguridad, el método preponderante para asegurar que las alarmas no van a activarse en caso de intrusión. En este sentido, es recomendable combinar kits de alarma tradicionales con aquellos que cuentan con una fuente de alimentación alternativa a la red eléctrica y que garanticen un plus de seguridad en caso de que los ladrones interrumpan el suministro durante algunos minutos.
Sistemas de detección solar
Uno de los kits de alarma más populares de entre los que contamos en nuestro catálogo son los relacionados la detección solar. Estamos ante unos equipos que son especialmente recomendables para ventanas, muros y vallas. Están equipadas con sistemas de protección antisabotaje y, asimismo, se alimentan con energía solar en virtud de sus baterías recargables, lo que garantiza una gran sencillez de mantenimiento. Su facilidad de colocación y discreción dan a este tipo de sistemas un plus de seguridad.
Estos sistemas, compatibles con los kits de alarma TASC-G5 disponen de consexión inalámbrica con panel de control, distancias de detección de hasta 10 metros, baterías recargables para su plena operatividad por la noche, protección antisabotaje y una distancia de transmisión en área abierta de hasta 100 metros.